Ronda (Màlaga). Agost 2014. Foto: FBarniol
-Bastante
desanimado, por Dios, puede quedarse un hombre recto en vista de tan bárbaras
muestras doradas, que imprimen al paisaje en el que nos encontramos un sello de
interés, avaricia, mísero y desnudo embrutecimiento del espíritu. ¿Necesita en
verdad un sencillo y honrado panadero presentarse de modo tan grandilocuente,
brillar y relampaguear al sol con su torpe anuncio de oro y plata, como un
príncipe o una dudosa dama coqueta? Que hornee
y amase su pan con honor y razonable modestia! En qué clase de mundo de engaño
empezamos o hemos empezado ya a vivir cuando el municipio, la vecindad y la
opinión pública no sólo tolera, sino que al parecer desdichadamente incluso
ensalza aquello que ofende a todo buen sentido, a todo sentido de la razón y
del agrado, a todo sentido de la belleza y de la probidad. […] Al diablo con el ansia miserable de parecer más de lo que se es.
Robert
Walser El paseo [Der Spaziergang, 1917]. Trad. Carlos Fortea. Madrid: Siruela,
2009 (8a ed.), pàg. 18-19.